Pero antes, permitame contarles como es que la Sopa de Tortilla llegó a nuestra vidas, para quedarse. Todo inicio con la aparición de la tortilla en la antigua Mesoamérica. Los libros de historia nos dicen que la primera tortilla se preparó combinando maíz fresco con granos secos para satisfacer a un antiguo rey Maya. En el año 10,000 AC, un humilde empleado inventó la tortilla para satisfacer el hambre de su rey. Tres mil años más tarde, en 7,000 AC, los residentes del Valle de Tehauacán empezaron a usar recipientes hechos de piedra para hervir el maíz que crecía salvaje a sus alrededores y lo incluyeron como ingrediente principal de la tortilla. Aproximadamente 1,000 años después, estos mismos Mayas empezaron el cultivo formal del maíz”. En el siglo XVI, los españoles llegaron a México, y trajeron la tradición de la sopa, así como los pollos y especias para hacer los caldos. Desde entonces, se ha cocinado la sopa de tortilla.


Hoy en dia la Sopa de Tortilla se prepara con un caldo de pollo o de jitomate. Hay muchas variaciones con verduras y otros ingredientes de acuerdo a las diferentes regiones de la república mexicana. Pero mi receta es muy de casa y consiste en una sopa no tan picosa y con el rico caldo de pollo el cual le da un sabor muy especial a las sopas.

Ingredientes
(preparación para cinco personas)
12 tortillas delgadas cortadas en cuadritos
 1/2 taza de aceite de preferencia de mazola
1 taza de cebolla
3 dientes de ajo
Una cuchara de oregano freso

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Mientras tanto en otra cazuela debemos preparar el dulce de piloncillo, para ello necesitamos poner a hervir en una olla a fuego lento una taza de agua, canela, el clavo y al final integrar las  rebanadas de naranja. El dulce sabor del piloncillo desprenderá un aroma exquisito el cual para mi trae innumerables recuerdos, que gracias a estos momentos puedo revivir aunque me encuentre fuera de México.  

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Finalizamos la preparación con el paso más divertido para mi, la decoración, ya que esta actividad solía hacerla cuando era niña y gozaba poniendo cada uno de los ingredientes de tal manera que quedaran uniformes y bien combinados. Para ello, debemos añadir la alegría, la canela, las pasas, el coco, el queso y las nueces y un baño con el dulce que preparamos con el piloncillo sobre las rebanadas de bolillo. Y así, sellar con broche de oro nuestra preparación de la tradicional Capirotada.